Estimado radioyente:
Ud. ciertamente oyó hablar de la denuncia interpuesta por padres de familia del en el colegio Villa Centinela Sur de Talcahuano relativo a abuso de menores por parte de los encargados de las llamadas «Ficha CLAP»:
¿De qué se trata el programa de salud que provocó denuncias de abuso sexual en colegio de Talcahuano?
Este control forma parte del “Programa de Salud Integral del Adolescente”, dependiente del Ministerio de Salud. Se desarrolla en todo el país y está enfocado en los adolescentes que tienen entre 10 y 19 años. Su objetivo es evaluar la situación psicoemocional y el desarrollo sexual de los jóvenes.
En el marco del operativo de salud donde se llevó a cabo, en el colegio Villa Centinela Sur de Talcahuano, y que dejó una serie de denuncias de abuso sexual en alumnos de 5º básico del colegio, padres y apoderados denunciaron que los menores tuvieron que desnudarse, sufrieron tocaciones, les realizaron preguntas íntimas y fueron expuestos a contenido sexual inapropiado para su edad.
https://www.youtube.com/watch?v=WCqR0mSw8Kk (incluye relato de los padres a partir del 3’)
Al tomar conocimiento de las malas prácticas hacia los estudiantes, el establecimiento educacional emitió una declaración donde aseguró que la actividad fue parte de un programa del Ministerio de Salud (Minsal) y agregó que comprendía que varios de los alumnos se hayan sentido vulnerados con el procedimiento, tanto física como psicológicamente.
En la práctica, un profesional (médico, matrona o asistente social, entre otros) realiza un “control de salud integral” al joven, con énfasis en el aspecto psicoemocional y de hábitos sexuales, de acuerdo a los criterios de «Educación Sexual Integral» -ESI-, que figuran en el «Instructivo» elaborado por el Ministerio de Salud (año 2016), bajo supervisión de la Organización Mundial de la Salud -OMS- y la Organización Panamericana de la Salud -OPS. Los resultados se registran en la ficha de «Historia Clínica del Adolescente» (HCA), propuesta originalmente por el Centro Latinoamericano de Perinatología (CLAP), al que debe el nombre de “ficha CLAP”.
El control se puede realizar tanto en un centro de salud primaria -CESFAM- como en el propio establecimiento educacional del alumno. Sin embargo, en el caso de que se realice en el colegio, se debe contar con la autorización expresa del apoderado, que firma un consentimiento informado, o del propio alumno, si es mayor de edad, situación que no ocurrió en esta ocasión.
Toda esta descripción, que trancribimos de la página del El Frente Nacional por la Libertad de Educación – FRENEDUC, demuestra la intromisión indebida del Estado en la educación y formación de los padres de familia.
Los menores de edad parecen ratones de experimento social por parte de organismos que no tienen ningún vínculo con ellos.
Si no hubiera sido por la denuncia de los padres de familia afectados por este procedimiento totalmente reñido con la moral y con los derechos de ellos como primeros formadores, el tema no hubiera sido conocido, ni existiría la necesaria vigilancia de otros padres a lo largo de Chile para averiguar si con sus hijos está ocurriendo algo similar.
Movilizados por esta inquietud, el referido Frente por la Liberta de Educación acaba de enviar, el pasado viernes 9 de junio, una carta al Ministro de Educación protestando contra esta y otras medidas gubernamentales que dañan gravemente la intimidad de los menores de edad, el derecho de los padres y la sana formación moral de los estudiantes.
Damos lectura de la declaración para el conocimiento de los padres de familia que nos oyen en este programa consagrado a la orientación de las familias de acuerdo a los principios de la moral católica y del derecho natural.
Santiago, 9 de junio 2023
“El Frente Nacional por la Libertad de Educación – FRENEDUC -, considera muy graves los acontecimientos que están teniendo lugar en nuestro país, producto de la implementación agresiva de la llamada Educación Sexual Integral – ESI -, que vulnera los derechos de los niños y de los padres y apoderados de todo CHILE, provocando en la familia gran inquietud, intranquilidad y desconfianza.
“Las actividades que en conjunto llevan a cabo el MINEDUC, el MINSAL y el Ministerio de la Mujery la Equidad de Género, tanto en colegios públicos como particulares subvencionados, incluyen la entrega de material y el desarrollo de actividades sexualmente explícitas desde el preescolar, cuyos contenidos son inadecuados para la edad y el desarrollo de los alumnos.
“Imágenes, libros, juguetes, canciones, coreografías, charlas y talleres, entre otros, ponen en evidencia que hoy el Estado está adoctrinando y pervirtiendo a los niños por medio de la ideología de género.
“Es el precio que el gobierno se ha obligado a pagar para recibir recursos de la llamada “cooperación internacional” y constituye un abuso de poder, a la vez que una intromisión inaceptable de organismos internacionales en los asuntos internos de Chile, con grave vulneración de nuestra soberanía y libre determinación como país.
“Pero Chile está despertando y cada día somos más quienes:
“NO ACEPTAMOS la tiranía de la igualdad que promueve la ideología de género, al ir contra la naturaleza de las cosas y el sentido común; NO ACEPTAMOS la reingeniería social que se busca lograr con la imposición de la ESI a nuestros niños, porque al distorsionar la antropología, los hará profundamente infelices; EXIGIMOS que se respete el derecho preferente que tenemos los padres y apoderados para educar a nuestros hijos, pudiendo escoger para ellos el proyecto educativo más acorde a nuestras convicciones y creencias;
“Los niños forman parte de una familia y son el futuro del país: NO SON PROPIEDAD DEL ESTADO y éste no debe usar la educación para adoctrinarlos ni manipularlos.
La familia precede al Estado, es la célula básica de la sociedad y pilar del desarrollo de un país: NO DEJAREMOS que la destruyan.
“Chile necesita una educación orientada al BIEN de los niños, que son un todo integral, y a la búsqueda de la VERDAD, para superar la grave crisis en que se encuentra. En sus manos, Ministro, está terminar con esta situación de abuso y vulneración de derechos humanos fundamentales.
“Los padres estaremos atentos y lucharemos, sin rendirnos, por nuestros derechos y los de nuestros niños, ejerciendo las acciones judiciales correspondientes”.
Hasta aquí los términos de la declaración de los padres de familia que adhieren a esta declaración.
Sin embargo, a las instituciones mencionadas por la declaración les faltó agregar el Instituto nacional de la Juventud, organismo dependiente del Gobierno y que permanentemente promueve para niños y jóvenes la ideología de género.
Entre ellas está el “Manual de Lenguaje Inclusivo y No Sexista”, (…) Esta guía contempla un marco conceptual, el uso del lenguaje como construcción de la realidad social, el uso de pronombres y determinantes sin género, evitar el uso de adverbios con marca de género y un llamado a utilizar el lenguaje incluyente no sexista”.
En pocas palabras, toda esta campaña de profunda transformación cultural promovida por los mencionados organismos dependientes del Gobierno, buscan, no sólo acabar con los conceptos morales que sostienen la familia cristiana, sino también con la identidad natural de las personas, tal como Dios las creó: “Varón y mujer, los creó”.
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